Enclavada en lo alto de una colina, Laguardia no solo es la capital de la Rioja Alavesa, sino también un auténtico viaje al pasado. Si te preguntas qué ver en Laguardia, este pueblo de bodegas más encantador de la Rioja Alavesa te sorprenderá con su imponente muralla y su trazado medieval, casi intacto desde su fundación en el siglo X, que la convierten en una de las villas más hermosas y emblemáticas del País Vasco.
Fundada como bastión defensivo del Reino de Navarra, “La Guarda de Navarra” ha sido testigo de batallas, epidemias y grandes transformaciones, aunque hoy te recibe con los brazos abiertos y un carácter inconfundible que mezcla historia, enología y belleza natural.
No es casualidad que Laguardia sea conocida como la Capital del Vino: rodeada de más de cien bodegas, esta villa invita a sus visitantes a perderse entre viñedos, degustar vinos exquisitos y pasear por callejuelas empedradas donde el tiempo parece haberse detenido. Si buscas disfrutar de una experiencia completa, un Tour por Laguardia con visita a una bodega y cata te permitirá adentrarte en la tradición vinícola de la región.
Pero Laguardia es mucho más que vino: sus iglesias, casas señoriales y vestigios arqueológicos, junto con las vistas privilegiadas a la Sierra de Cantabria, hacen de esta parada una experiencia única.
¿Listo para descubrir todo lo que ver en Laguardia?
Qué ver en Laguardia: 10 lugares imprescindibles
Recorrer los encantos de Laguardia es una experiencia que se puede disfrutar tranquilamente en medio día, aunque la villa es perfecta para una escapada de fin de semana. Si quieres adentrarte en su fascinante historia y descubrir todos sus rincones más emblemáticos, te recomendamos este Free Tour por Laguardia. Además, los pintorescos pueblos cercanos también merecen tu atención y complementan perfectamente tu visita.
1. Pasear por la muralla de Laguardia
La primera parada en nuestro recorrido por los rincones que ver en Laguardia nos lleva directamente a su imponente muralla, una fortificación levantada en el siglo XIII que rodea el casco antiguo. Cruzar sus muros de piedra arenisca es como viajar en el tiempo: nos adentramos en un casco medieval perfectamente conservado, con su trazado original y dos de sus torreones, hoy convertidos en campanarios.
Laguardia sigue siendo una auténtica villa fortificada. Gran parte de su muralla y las puertas de acceso permanecen en excelente estado, invitándonos a explorar cinco históricas entradas que daban paso a la villa: la puerta de Páganos, al oeste; la de Mercadal, al sur; la de San Juan, al sureste; la de Santa Engracia, al noreste; y la emblemática puerta de Carnicerías, al este.
Esta última, conocida también como la Puerta Nueva, no se abrió hasta el siglo XV y tiene un profundo simbolismo. Junto a ella, una placa inscrita con las palabras: “Paz a los que llegan. Salud a los que habitan. Felicidad a los que marchan”, da la bienvenida a todos los visitantes. Este mensaje, sencillo y emotivo, convierte el acceso a Laguardia en una experiencia única.
2. Calles con Historia
Recorriendo las calles empedradas de Laguardia, uno se sumerge en un escenario pintoresco donde el tiempo parece haberse detenido. Al caminar por la Calle Mayor, descubrirás una serie de impresionantes casas palaciegas de los siglos XVI y XVII, adornadas con los escudos heráldicos de las familias más influyentes del pueblo.
En una de estas majestuosas casas se encuentra la oficina de turismo, un lugar ideal para comenzar la visita y conocer más sobre los secretos de Laguardia. Aquí, no solo obtendrás información útil, sino que también podrás admirar un hermoso calado que añade un toque de distinción al lugar.
Laguardia, con su estructura ordenada, se articula principalmente en tres calles paralelas: la Calle Mayor, la Calle Paganos y la Calle Santa Engracia, conectadas por estrechas callejuelas perpendiculares. Al recorrerlas, te sorprenderás con la variedad de estilos arquitectónicos que se alzan a ambos lados: edificios medievales, renacentistas, barrocos y neoclásicos que cuentan historias de siglos pasados.
Personalmente, este encantador laberinto de callejuelas y edificios históricos nos recuerda un poco a nuestra querida Santillana del Mar, con esa misma atmósfera mágica que invita a perderse por sus rincones y sumergirse en su rica historia.
3. Plaza Mayor: El corazón encantador de Laguardia
Cruzando el umbral de la Puerta Nueva, accedes a la Plaza Mayor, el vibrante centro neurálgico de Laguardia. Esta hermosa plaza porticada es un verdadero escaparate de historia y arquitectura.
En su lado principal se alza el ayuntamiento del siglo XIX, un edificio elegante cuyo escudo de Laguardia y un peculiar reloj de carrillos destacan en su fachada. Este reloj, de construcción moderna (1998), ha adquirido tal popularidad que se ha convertido en todo un icono de la villa. Cada día, a las 12, 14, 17 y 20 horas, los muñequitos, los dantzaris y el cachimorro, figuras tradicionales de las fiestas de San Juan, cobran vida y bailan al ritmo del pasacalles, un espectáculo que no te puedes perder.
En un lateral de la plaza, el Antiguo Ayuntamiento, de estilo renacentista y construido en el siglo XVI, también merece atención. Su fachada guarda una interesante placa que muestra las antiguas medidas oficiales: la vara, la media vara, la teja y el ladrillo, utilizadas para regular el comercio y evitar engaños. En lo alto, resalta el escudo imperial de Carlos V, un detalle que rememora el pasado glorioso de esta villa.
4. Iglesia de Santa María de los Reyes
Paseando desde el ayuntamiento por la calle Santa Engracia, llegarás a la Plaza del Gaitero, un encantador rincón de Laguardia donde se encuentra uno de sus tesoros más importantes: la Iglesia de Santa María de los Reyes.
Su construcción comenzó en el siglo XII y se completó en el siglo XVI, lo que le otorga una gran riqueza arquitectónica, reflejo de varias épocas. Aunque el interior de la iglesia es acogedor y elegante, lo que realmente llama la atención es su puerta gótica, un pórtico policromado que destaca entre los pocos de su tipo en España.
El pórtico está lleno de detalles fascinantes, con imágenes que narran la vida de la Virgen. Las tallas de las jambas representan a los doce Apóstoles, mientras que en el parteluz se encuentra la escultura de Santa María de los Reyes. El tímpano está dividido en tres secciones, con relieves que ilustran episodios de la vida de la Virgen, una obra maestra que ha llegado a nuestros días gracias a la conservación propiciada por el cierre del pórtico en el siglo XVI.
En el interior, destaca el retablo mayor, una obra impresionante de Juan de Bascardo que data del siglo XVII, un ejemplo sublime del arte barroco.
Para visitar la iglesia, es necesario contactar previamente con la oficina de turismo (Tlfno.: 945 60 08 45), lo que garantiza una experiencia más íntima y enriquecedora al explorar este monumento tan especial.
5. Plaza del Gaitero
Sin duda, una de las plazas más curiosas y singulares de Laguardia es la Plaza del Gaitero, un lugar repleto de historia y tradición.
En esta villa de la Rioja Alavesa, la gaita y la dulzaina son las grandes protagonistas de las fiestas populares, como la Danza de los Arcos, Chulalai, Troqueados de San Juan Degollao o la Danza del Árbol, entre otras, que llenan de vida las calles del pueblo. Cada mes de mayo, se celebra el Día del Gaitero, un evento que incluye conciertos, concursos, dianas y pasacalles, en honor a la música y los músicos locales.
No es de extrañar, por tanto, que junto a la Iglesia de Santa María se haya rendido homenaje a los músicos con esta plaza. Sin embargo, lo que realmente destaca es la obra escultórica diseñada por el artista vitoriano Koko Rico, que rinde tributo a los «viajeros». En dos plataformas de acero, cubiertas de pies, botas, sandalias, zapatos, bolsos y maletas de bronce, el escultor te invita a reflexionar sobre los caminos recorridos y las huellas que dejamos.
Para nosotros, en Glutendtrotters, esta escultura tiene un valor especial, ya que nos sentimos profundamente homenajeados por representar a aquellos que, como nosotros, recorren el mundo con una mirada curiosa y un espíritu de aventura.
6. Torre Abacial: Un mirador histórico en Laguardia
La Torre Abacial es uno de los edificios más representativos de Laguardia, construido nada menos que en el siglo XIII. Originalmente, formó parte del sistema defensivo de la villa, defendiendo al pueblo de posibles amenazas. Hoy en día, esta majestuosa torre es el campanario de la Iglesia de Santa María de los Reyes y se puede visitar.
Subir a la torre es una experiencia única, ya que desde su cima se pueden disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas de la Rioja Alavesa, con sus interminables viñedos, paisajes y montañas que conforman un entorno natural de belleza incomparable. Sin duda, una parada que no puede faltar en vuestro recorrido por Laguardia.
7. Casa Primicia
La Casa Primicia es el edificio más antiguo de Laguardia y, al mismo tiempo, se enorgullece de ser la bodega «original» más antigua de España.
Construida en el siglo XI, su función inicial era almacenar los impuestos de diezmos y primicias que se entregaban a la iglesia. Desde el siglo XV y hasta los años ochenta, esta casa ha sido testigo de la elaboración de vino de forma ininterrumpida, y aún hoy se mantiene registrada como bodega en el Consejo Regulador de Rioja. Su estructura original de producción ha sido preservada a lo largo de los siglos.
Al visitar la Casa Primicia, no solo se puede admirar su puerta abovedada de arco apuntado y sus ventanas adinteladas, sino también los lagares de piedra y los calados donde el vino envejece en barricas a nueve metros de profundidad.
8. Casa Palacio de Samaniego
La Casa Palacio de Samaniego, construida en el siglo XVII, es uno de los edificios más emblemáticos de Laguardia y un lugar clave para comprender la vida y obra de Félix María Samaniego, célebre fabulista de la Ilustración española. Este majestuoso palacio neoclásico, adornado en su fachada con el escudo de la familia Ramírez de la Piscina y Acedo, fue el lugar de nacimiento del escritor. Actualmente, alberga dependencias de la Diputación Foral, conservando su relevancia histórica.
Bajo el palacio se encuentra la famosa Bodega El Fabulista, un lugar perfecto para explorar el legado de Samaniego mientras disfrutas de la tradición vinícola de la región. Además, en las cercanías puedes visitar la finca La Escobosa, un viñedo donde el fabulista se inspiró para muchas de sus obras.
El recorrido literario por Laguardia culmina en la iglesia de San Juan Bautista, donde descansan los restos de Félix María Samaniego, convirtiendo este viaje en una experiencia única para los amantes de la historia, la literatura y el vino.
9. Iglesia de San Juan Bautista
En Laguardia, la religión y la historia se entrelazan en sus dos impresionantes iglesias, San Juan Bautista y Santa María de los Reyes, que se encuentran a tan solo 300 metros de distancia. Visitar estas iglesias es, sin duda, una de las mejores experiencias que hacer en Laguardia, ya que son un testimonio de siglos de historia y arte.
La Iglesia de San Juan Bautista destaca por su portada sur, conocida como la «de los abuelos», que es un bello ejemplo de estilo gótico. Esta portada está adornada con columnas que representan la Anunciación, y su retablo barroco está dedicado a San Juan Bautista. A los pies de la iglesia, encontraréis la capilla del Pilar, construida en estilo barroco tras la destrucción de una antigua portada gótica.
La torre-campanario de la iglesia, originalmente una puerta de la muralla medieval, fue reformada en el siglo XVI y sirvió como torre de defensa del lado sur de la villa.
Ambas iglesias son un verdadero tesoro que refleja la rica herencia de Laguardia y su evolución a lo largo de los siglos.
10. El Estanque Celtibérico de la Barbacana
Uno de los lugares más antiguos y fascinantes de Laguardia es el Estanque Celtibérico de la Barbacana, una impresionante obra de ingeniería hidráulica construida hace 2.100 años, en la Edad del Hierro. Este estanque, que tiene una capacidad para almacenar 300.000 litros de agua, es el mayor de su tipo encontrado en Europa hasta la fecha. Su ubicación, en la parte sur del cerro donde se asienta la villa medieval, aprovecha un manantial cercano para recoger y almacenar el agua.
Descubierto en 1998 durante las obras de construcción de un aparcamiento subterráneo, el estanque ha revelado importantes hallazgos arqueológicos, como un ara romana dedicada a las Matres, una deidad céltica asociada a manantiales y acuíferos medicinales. Este descubrimiento ha sugerido que el estanque pudo haber tenido también un carácter ritual.
Sabías que… ❓🤔 ¿el Estanque Celtibérico de la Barbacana en #Laguardia es el depósito más grande de la Edad de Hierro en Europa con más de 300.000 litros de capacidad? pic.twitter.com/kN8CtduasT
— Rioja Alavesa (@RiojaAlavesa) December 2, 2018
Centro de Interpretación
Si deseas profundizar en su historia, el Centro de Interpretación del estanque ofrece una experiencia enriquecedora. Bajo una cubierta arquitectónica que protege la estructura, los visitantes pueden disfrutar de recursos audiovisuales, reconstrucciones corpóreas y recreaciones pictóricas que ayudan a comprender la relevancia de esta infraestructura en la vida de los antiguos habitantes de Laguardia.
Sin lugar a dudas, el Estanque Celtibérico de la Barbacana es una visita imprescindible para quienes deseen conocer más sobre la historia de Laguardia y el ingenio de sus antiguos moradores.
¿Te gustaría disfrutar de unas vistas espectaculares de los viñedos de Laguardia y la Sierra de Cantabria?
Entonces, no puedes perderte el Paseo del Collado, que se encuentra fuera de las murallas, entre las puertas de Santa Engracia y Páganos. Este paseo ofrece una experiencia única, con impresionantes panorámicas de las bodegas de Laguardia. Además, en el centro del recorrido se encuentra el busto de Félix María Samaniego, una escultura destacada que rinde homenaje a este autor y que forma parte de la arquitectura del hierro del País Vasco. Un final perfecto para una caminata inolvidable.
Como mencionamos al inicio de este post, aunque Laguardia se puede recorrer en pocas horas, creemos que es el destino perfecto para una escapada de un par de días. Por eso, queremos sugerirte varias actividades para disfrutar al máximo de la capital de la Rioja Alavesa y sus alrededores.
Descubre qué ver en Laguardia y alrededores
Explora los calados subterráneos de Laguardia
En Glutendtrotters somos apasionados del buen vino, y los calados de Laguardia son una parada imprescindible en tu visita. Estas galerías subterráneas, construidas inicialmente con fines defensivos, se han convertido en bodegas ideales para conservar el vino gracias a sus perfectas condiciones de temperatura y humedad.
Muchos de estos calados siguen activos y ofrecen visitas guiadas donde puedes conocer su fascinante historia, la tradición vinícola local, y disfrutar de un entorno mágico mientras degustas vinos únicos. Sumérgete en esta experiencia inolvidable en pleno corazón del casco antiguo.
Vive la experiencia en las bodegas de Laguardia
Rodeada por más de 3000 hectáreas de viñedos, Laguardia cuenta con más de 50 bodegas que ofrecen visitas y catas para todos los gustos. Desde la histórica Bodega Casa Primicia, galardonada por su enoturismo, hasta la impresionante arquitectura moderna de Ysios, cada bodega tiene su encanto especial.
Si buscas una experiencia completa, no te pierdas la Bodega Solar de Samaniego, donde tradición y diseño interior se combinan en una visita inolvidable. ¿Buscas algo diferente? Muchas bodegas también ofrecen alojamiento para disfrutar de unos días rodeados de paisajes espectaculares.
Descubre la Ruta de los Dólmenes
Si eres amante de la historia y la naturaleza, la Ruta de los Dólmenes es ideal para ti. Estos monumentos megalíticos, que datan de entre el 3000 y 1000 a.C., reflejan las prácticas funerarias de las primeras comunidades agrícolas de la región.
Con ocho dólmenes distribuidos por Laguardia y sus alrededores, como La Chabola de la Hechicera y El Alto de la Huesera, este recorrido combina senderismo con historia, ofreciendo vistas espectaculares de los paisajes locales. Si dispones de poco tiempo, prioriza los más cercanos y disfruta de una experiencia única.
Si vienes a #RiojaAlavesa no te puedes perder la ruta de los dólmenes.
La zona está repleta de ellos. Hazte con un mapa y descúbrelos🚗
Y para terminar la ruta…. un vino con aperitivo km 0 en Bodegas Lozano ¿Buen plan, verdad?#dolmen #rioja #laguardia #elciego #labastida pic.twitter.com/Vzoh5lwN0w
— Bodegas Lozano (@BodegasLozano) October 16, 2023
Viaja al pasado en el poblado de La Hoya
A tan solo un kilómetro de Laguardia, el yacimiento arqueológico del Poblado de La Hoya te transporta a la Edad del Bronce y del Hierro. Este antiguo núcleo comercial y habitacional ofrece una visión fascinante de la vida de las comunidades celtíberas que habitaron la región.
Visita el Centro de Interpretación para conocer herramientas, cerámicas y recreaciones de cómo era el poblado, incluida una casa a tamaño real. Este plan es gratuito y perfecto para quienes desean sumergirse en la historia antigua.
Poblado de La Hoya https://t.co/l76CPpShny Un viaje a otra época. #turismo #Laguardia #Alava pic.twitter.com/ub4QA2ZhFy
— Senditur (@senditur) December 20, 2018
Conéctate con la naturaleza en las Lagunas de Laguardia
El complejo lagunar de Laguardia, compuesto por humedales como Carralogroño, Carravalseca, y El Prao de la Paúl, es un paraíso para los amantes de la biodiversidad. Aquí podrás observar aves migratorias, hacer un picnic en familia o simplemente disfrutar de la tranquilidad de un entorno protegido.
Los senderos señalizados hacen que este sea un plan accesible y perfecto para desconectar mientras descubres la flora y fauna únicas de la región. La mejor época para visitarlas es de marzo a septiembre, cuando la vida silvestre está en pleno esplendor.
#Laguardia. Las lagunas de #Carralogroño, #Carravalseca, #PraodelaPaúl y #Musco forman el Complejo Lagunar. #Álava Foto: @MikelVinnaspre pic.twitter.com/KfgsDDbsh1
— Patrimonio de Álava (@PatrimonioAlava) November 21, 2017
Aprende y disfruta en el Museo del Vino Villa Lucía
Si viajas con niños, el Museo del Vino Villa Lucía es una parada ideal. Este museo interactivo les permitirá aprender sobre el proceso de elaboración del vino de una manera divertida y didáctica, con exposiciones táctiles y una cata virtual.
Desde los tipos de suelo hasta las herramientas utilizadas, cada detalle está pensado para que toda la familia disfrute mientras descubre los secretos de la vinicultura. Sin duda, un plan que combina aprendizaje y diversión para todas las edades.
Con estas experiencias, Laguardia y sus alrededores se convierten en un destino perfecto para los amantes del vino, la historia y la naturaleza. ¿Listo para descubrir todo lo que este encantador rincón tiene para ofrecer?
Dónde comer sin gluten en Laguardia
¿Te vas a ir de Laguardia sin probar un maridaje perfecto? Disfruta de la exquisita oferta gastronómica de la Rioja Alavesa, siempre acompañada de sus mejores vinos.
En Laguardia encontrarás varios restaurantes que ofrecen platos aptos para celíacos:
- Amelibia: Cocina tradicional de la zona, ubicado fuera de la muralla medieval.
Si buscas una experiencia más tranquila, en Glutendtrotters te recomendamos el restaurante El Medoc Alavés, situado en el Hotel Silken Villa de Laguardia. Su agradable terraza rodeada de jardines y su excelente servicio harán que tu comida sea inolvidable.
Dónde dormir en Laguardia
Durante nuestra visita a Laguardia, elegimos el Hotel Silken Villa de Laguardia, y fue todo un acierto. Su ubicación es inmejorable: a pocos pasos de la ciudad amurallada y a minutos de algunas de las mejores bodegas de la zona. Un lugar estratégico para una escapada perfecta.
El hotel ofrece aparcamiento gratuito y cuenta con instalaciones modernas: habitaciones amplias, limpias y cómodas. Además, podrás disfrutar de una piscina exterior, una zona de recreo infantil junto a la terraza del restaurante y un servicio excepcional que te hará sentir como en casa.
¿Necesitas más motivos para reservar?
El Wine Oil Spa del hotel transforma cualquier estancia en una experiencia inolvidable.
Si te ha gustado este recorrido por Laguardia, ¡nos encantaría conocer tu experiencia! Comparte tus impresiones con toda la comunidad de Glutendtrotters y cuéntanos qué rincones de esta maravillosa villa te han enamorado. Ya sea que hayas disfrutado de su historia, sus vinos o sus vistas, ¡nos encantará saber cómo viviste tu aventura en Laguardia!
Y si tienes tiempo, no dejes de visitar Logroño, una ciudad vibrante que te sorprenderá con su gastronomía, su ambiente acogedor y, por supuesto, sus opciones sin gluten. ¡Te esperamos con más recomendaciones de destinos y experiencias sin gluten!