Planificar qué ver en Cantabria en 3 días puede parecer un reto, pero con una buena ruta podrás disfrutar de lo mejor de esta región del norte de España: paisajes infinitamente verdes, pueblos con encanto, playas salvajes y una gastronomía que conquista a cada viajero. En esta guía te mostramos un itinerario pensado para aprovechar al máximo una escapada corta, combinando mar, montaña y cultura en una experiencia auténticamente cántabra.
Cantabria, bañada por el Cantábrico y custodiada por montañas que parecen gigantes verdes, guarda joyas naturales e históricas de incalculable valor. Sus playas, sus cuevas prehistóricas y su patrimonio cultural hacen de esta región un destino que enamora a primera vista. Desde las praderas del interior hasta los pueblos pesqueros que huelen a sal y tradición, cada rincón invita a detenerse y disfrutar.
Y si aún dudas, déjate llevar por nuestra ruta paso a paso y descubre qué ver en Cantabria en 3 días con nuestra selección de lugares únicos, experiencias auténticas y consejos Glutendtrotter para que tu viaje sea inolvidable.
Día 1: Santander, el punto de partida perfecto para tu ruta por Cantabria
Manuel y yo siempre decimos entre risas que Santander es la segunda ciudad más bonita del mundo, aunque aún no conocemos la primera. Será porque esta ciudad nos ha robado el corazón con su elegancia, su bahía y su ritmo tranquilo junto al mar.
Si estás planificando qué ver en Cantabria en 3 días, no hay mejor forma de empezar que dedicando tu primer día a descubrir la capital, una ciudad cómoda, luminosa y llena de rincones con encanto.
A lo largo de esta jornada recorrerás lugares emblemáticos, desde el Faro de Cabo Mayor hasta el Centro Botín, combinando paisajes naturales, historia y arte frente a la bahía más bonita de España.
Para empezar con buen pié, te recomendamos este free tour para conocer de la mano de un guía los rincones de nuestra ciudad.
1. Faro de Cabo Mayor y Costa Quebrada: inicio de una ruta escénica
Este faro histórico, rodeado de impresionantes acantilados, ofrece vistas panorámicas de la costa y alberga una pequeña exposición de arte dedicada al mundo marítimo. Desde aquí comienza una de las rutas más bellas de la región, la Costa Quebrada, que conecta algunos de los paisajes más salvajes de Cantabria. Además, el faro marca el inicio de la zona más turística de la ciudad: El Sardinero.
2. Playa de Mataleñas: baño y desayuno con vistas
Bajando desde el faro, encontrarás una cala escondida entre acantilados: Mataleñas, perfecta para quienes buscan un rincón más tranquilo. Si el tiempo acompaña, nada mejor que darte un baño en sus aguas turquesas y después disfrutar de un desayuno con vistas al mar en el cercano Hotel Chiqui.
3. El Sardinero y los Jardines de Piquío: el alma marinera de Santander
El Sardinero es la playa más famosa de Santander, un amplio arenal dividido por los Jardines de Piquío, donde el paisaje parece una postal. Desde su fina arena podrás ver la Isla de Mouro, la Península de la Magdalena y el majestuoso Hotel Real. Además, es un lugar ideal para probar la gastronomía local en alguno de los restaurantes frente al mar.
📍 Si quieres ir de la mano de un guía para conocer esta zona tan emblemática de Santander, te recomendamos este free tour por el Sardinero que también incluye el Palacio de la Magdalena.
4. Palacio de la Magdalena: historia, vistas y paseo real
Antigua residencia veraniega de los reyes de España, el Palacio de la Magdalena es hoy uno de los grandes símbolos de la ciudad. Puedes recorrer sus jardines, visitar el Museo del Hombre y el Mar, o subir al tren turístico “Magdaleno” para disfrutar del recorrido con vistas espectaculares a la bahía.
📍 Te recomendamos esta visita guiada por el Palacio de la Magdalena y su parque.
5. Puertochico y Paseo Marítimo: sabor local y vistas de postal
La zona de Puertochico combina el ambiente marinero de siempre con una animada oferta gastronómica. Desde aquí puedes recorrer el Paseo Marítimo, pasando por la Duna Zaera, el Palacete del Embarcadero y los famosos Raqueros, las esculturas de bronce que rinden homenaje a los niños que antaño se lanzaban al agua de cabeza.
6. Centro Botín: arte moderno frente a la bahía
Diseñado por el prestigioso arquitecto Renzo Piano, el Centro Botín es una de las visitas imprescindibles en Santander. Además de sus exposiciones de arte contemporáneo, las vistas desde sus escaleras exteriores son inmejorables. No te vayas sin subir: tendrás una de las mejores fotos de tu viaje.
📍 Reserva tus entradas con antelación.
7. Paseo en barco por la bahía: otra perspectiva de Santander
Si el tiempo acompaña, una de las mejores experiencias es hacer una excursión en barco con la empresa Los Reginas, que ofrece diferentes rutas por la bahía. Es una forma única de contemplar la ciudad desde el mar y entender por qué se dice que Santander tiene la bahía más bonita del mundo.
📍 No hagas colas para sacar tu billete y reserva este paseo en barco por la bahía.
8. Mirador del Río de la Pila: vistas panorámicas y tapeo
Accesible de forma gratuita en funicular, este mirador ofrece vistas panorámicas de Santander desde la parte más alta de la ciudad. Está cerca de una zona concurrida para tapeo para el aperitivo o el tardeo.
9. Casco Antiguo: historia, mercados y refugios subterráneos
El Casco Antiguo de Santander fue reconstruido tras el incendio de 1941. Hoy conserva lugares llenos de historia como la Catedral, la Plaza Porticada y el Mercado del Este. Si te interesa la historia local, no te pierdas el Refugio Antiaéreo de la Guerra Civil ni la Antigua Muralla Medieval, dos espacios musealizados muy recomendables.
10. Museos para un día cultural
Si te queda tiempo, visita el Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria, con piezas únicas halladas en las cuevas cántabras, o el Museo Marítimo del Cantábrico, que encantará a los niños con su acuario y su colección dedicada al mar.
Dónde comer sin gluten en Santander
Al recorrer Santander descubrirás una gran oferta gastronómica, también apta para celíacos. En el centro y en El Sardinero encontrarás restaurantes y cafeterías con opciones sin gluten donde probar platos típicos como las rabas, el pescado fresco o la quesada pasiega.
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Santander ofrece una gran variedad de servicios al turismo, sobre todo, en temporada estival, como los free tours para conocer el Anillo Cultural de la ciudad o el autobús turístico City Sightseeing, para recorrer los lugares más emblemáticos a lo largo de todo el día.
Consejo Glutendtrotter
Santander se disfruta mejor caminando. Aunque cuenta con servicios turísticos como los free tours del Anillo Cultural o el autobús City Sightseeing, te recomendamos recorrerla a pie, sin prisas, para empaparte de su esencia marinera.
Santander es una ciudad que se descubre sin prisas, disfrutando de su bahía, sus miradores y ese aire elegante que la hace única en el norte de España. Dedicarle el primer día de tu itinerario es la mejor forma de empezar a sentir la esencia de esta tierra: mar, montaña y buena vida.
Tras este recorrido por la capital cántabra, estarás listo para continuar tu aventura y seguir descubriendo qué ver en Cantabria en 3 días, adentrándote en sus pueblos con encanto, sus valles verdes y su naturaleza desbordante.
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MAPA DE SANTANDER
DÍA 2: SANTILLANA DEL MAR
Resulta complicado elegir qué ver en Cantabria en 3 días cuando cada rincón de esta tierra infinita tiene algo especial. Pero si hay un lugar que resume la esencia de la región —historia, arte y encanto rural— ese es Santillana del Mar, uno de los pueblos más bonitos de España y una parada imprescindible en tu ruta por Cantabria.
Con calles empedradas, casonas blasonadas y un ambiente que te transporta al medievo, Santillana del Mar fue declarado conjunto histórico-artístico en 1886. Y aunque su nombre diga lo contrario —ni santa, ni llana, ni con mar—, te aseguramos que su belleza es incomparable. Ponte calzado cómodo y prepárate para perderte entre historia y tradición. Te recomendamos hacer un free tour para saber toda la historia de este pueblo medieval de la mano de un guía experto.
Cómo llegar a Santillana del Mar
Te recomendamos llegar con tu propio vehículo, o alquilar uno, para moverte con libertad y aprovechar el día. Si viajas en transporte público, puedes tomar un tren desde Santander hasta Torrelavega y, desde allí, un autobús hacia Santillana del Mar. Eso sí, las conexiones no son muy frecuentes, por lo que el coche sigue siendo la opción más práctica.
📍 Puedes realizar esta excursión desde Santander que incluye la visita a la Neocueva Altamira.
1. Museo Diocesano Regina Coeli: arte sacro y patrimonio histórico
Ubicado en un antiguo convento dominico del siglo XVII, este museo alberga más de 800 piezas religiosas, muchas de ellas retiradas tras el Concilio Vaticano II. Una visita perfecta para los amantes del arte y la historia eclesiástica.
2. Casco Histórico: un paseo por la Edad Media
Caminar por el casco histórico de Santillana del Mar es como retroceder en el tiempo. Las casas montañesas con balcones de madera, los escudos nobiliarios y los empedrados te invitan a descubrir la historia detrás de cada fachada. No dejes de visitar el Palacio de Peredo-Barreda, hoy convertido en espacio cultural.
3. Plaza Abad Francisco Navarro y los museos locales
Alrededor de la Colegiata se concentra buena parte de la vida del pueblo. En esta plaza podrás visitar el Museo del Barquillero, que muestra la historia de este tradicional dulce español, y el Museo de Jesús Otero, dedicado al escultor cántabro.
4. Colegiata de Santa Juliana: el corazón románico de Santillana
En el centro de la villa se levanta la Colegiata de Santa Juliana, joya del arte románico y símbolo de Santillana. Su claustro es una auténtica maravilla, con capiteles tallados que narran escenas bíblicas. Aquí descansan las reliquias de Santa Juliana, patrona de la villa.
5. Palacio de los Velarde y Plaza Mayor de Ramón Pelayo
En la Plaza de las Arenas se encuentra el Palacio de los Velarde, una elegante muestra de arquitectura renacentista. Muy cerca, la Plaza Mayor de Ramón Pelayo reúne edificios de distintas épocas, como la Casa de la Parra o la Torre del Merino, creando un conjunto arquitectónico único.
📍 Realiza esta visita guiada al Palacio de los Velarde
6. Museo de la Tortura: una mirada al pasado más oscuro
Uno de los museos más visitados de Santillana es el Museo de la Tortura, que expone instrumentos de castigo y pena capital desde la Edad Media hasta el siglo XIX. Es una visita impactante, pero también interesante desde el punto de vista histórico.
7. Convento de San Ildefonso: tradición y dulces artesanales
Muy cerca del Museo Diocesano se encuentra el Convento de San Ildefonso, donde las monjas clarisas elaboran dulces artesanales.
8. Cueva de Altamira: arte rupestre universal
A poca distancia de la villa, aproximadamente 3 kilómetros, se encuentra la réplica de una de las cuevas prehistóricas más importantes de toda Europa con representaciones del Paleolítico Superior. La cueva original se encuentra cerrada por motivos de conservación de las pinturas pero tanto visita a la la réplica como el museo adyacente son una experiencia en sí misma.
📍 Realiza esta visita guiada a la Neocueva para entender mejor la historia de la cueva.
9. Playa de Santa Justa: el secreto mejor guardado
Aunque el dicho popular diga que Santillana “no tiene mar”, la Playa de Santa Justa demuestra lo contrario. A pocos kilómetros del centro, este rincón natural entre acantilados es perfecto para disfrutar de la brisa cántabra y unas vistas espectaculares del litoral.
Dónde comer sin gluten en Santillana del Mar
Santillana ofrece excelentes opciones para celíacos. Restaurantes como La Villa cuentan con menús adaptados y platos tradicionales sin gluten. No olvides pasar por la confitería Las Quintas, donde podrás probar sobaos y quesadas sin gluten, elaborados con mimo y sabor auténtico.
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Después de este paseo por Santillana del Mar, entenderás por qué es uno de los pueblos más visitados del norte de España. Su mezcla de arte, historia y autenticidad lo convierte en una parada imprescindible dentro de tu itinerario de qué ver en Cantabria en 3 días. Mañana te espera uno de los pueblos costeros más visitados por los turistas durante el verano.
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MAPA DE SANTILLANA DEL MAR
Día 3: Laredo, esencia marinera y playas infinitas
Para cerrar tu ruta de qué ver en Cantabria en 3 días, te proponemos un cambio de escenario: del encanto medieval de Santillana del Mar a la brisa atlántica de Laredo, una de las cuatro joyas marineras de la región junto a Santander, Castro Urdiales y San Vicente de la Barquera.
El nombre de Laredo proviene de glaretum, “lugar arenoso”, y no podía ser más acertado. Aquí el mar y la arena son protagonistas absolutos: desde la tranquila playa del Regatón, escondida entre marismas, hasta la inmensa playa de La Salvé, con más de cuatro kilómetros de dunas doradas. Laredo combina historia, tradición pesquera y modernidad en un entorno natural incomparable.
1. La Puebla Vieja y el Arrabal: el alma medieval de Laredo
Declarados Conjunto Histórico-Artístico en 1970, estos barrios conservan la esencia de la villa original. Sus calles empedradas serpentean entre casonas de los siglos XVI al XVIII, como la Casa de la Familia Mar o la Casa de la Marquesa de Arcentales. Pasear por aquí es sumergirse en la historia marinera de la villa.
2. Muralla Medieval: vestigios del pasado defensivo
En la Puebla Vieja aún se conservan restos de la muralla del siglo XIII, junto con algunas de sus doce puertas originales: San Martín, San Marcial, San Lorenzo y la Puerta Oeste hacia Santa María. Estas estructuras evocan la importancia estratégica de Laredo durante la Edad Media.
3. Iglesia de Santa María de la Asunción: joya del gótico cántabro
Dedicada a la patrona de la villa, esta iglesia es Monumento Nacional desde 1931 y uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica en el norte de España. Su interior guarda tesoros como el retablo de la Virgen de Belén del siglo XV, de estilo flamenco, y una magnífica pila bautismal. Las cinco naves del templo muestran la evolución artística de diferentes siglos.
4. El Ensanche y los Puertos: modernidad junto al mar
El Ensanche es la zona más animada de Laredo, con comercios, terrazas y la Plaza de Carlos V como punto de encuentro. A pocos pasos, encontrarás los dos puertos:
- Y el Puerto Deportivo, con más de 800 amarres y un ambiente náutico vibrante, perfecto para disfrutar del atardecer.
- El puerto pesquero, donde todavía salen embarcaciones en busca de los tesoros del Cantábrico.
5. Playa de La Salvé: la joya dorada de Laredo
Con más de cuatro kilómetros de arena fina, la playa de La Salvé es uno de los arenales más largos y espectaculares del norte de España. Galardonada con la “Q” de Calidad Turística, es ideal para disfrutar de un día de sol, deportes acuáticos o simplemente pasear junto al mar.
6. Club Náutico y actividades de mar
El Club Náutico de Laredo, ubicado en la zona del Puntal, es el centro neurálgico de la actividad marítima y sede de competiciones náuticas. Además, la villa ofrece un sinfín de actividades: buceo, snorkel, paddle surf, esquí acuático, vela o rutas en barco por la Bahía de Santoña para contemplar el atardecer desde el mar.
7. Paseo en barco
Es una experiencia inolvidable para disfrutar de un atardecer en alta mar por la Bahía de Santoña. Y si estás buscando elevar tu viaje a una experiencia más aventurera, Laredo es el destino ideal. Aquí, tienes la oportunidad de sumergirte en actividades como buceo y snorkel, además de opciones como alquilar canoas, practicar esquí acuático, kite surf, vela o surf.
📍 Te recomendamos este paseo en barco hasta el Faro del Caballo de Santoña, merece totalmente la pena.
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8. Mirador de La Atalaya: la mejor panorámica de la villa
A solo 20 minutos a pie de la Puebla Vieja, el Mirador de La Atalaya ofrece una vista de 360º de Laredo: la bahía, el puerto, la playa de La Salvé y el casco antiguo bajo tus pies. Es el lugar perfecto para despedirte de la villa con una fotografía inolvidable.
9. Fiestas de Laredo: tradición y color
Si visitas Laredo en verano, vivirás dos de sus celebraciones más emblemáticas:
- La Batalla de Flores (agosto): una explosión de color declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional, donde carrozas cubiertas de flores naturales recorren las calles en un desfile espectacular.
- El Desembarco de Carlos V (septiembre): recreación histórica del arribo del emperador a la villa, con trajes de época y ambiente festivo en cada rincón.
Dónde comer sin gluten en Laredo
Para culminar tu visita, disfruta de la gastronomía local en restaurantes como El Faro, La Parra Bistró o Casa Silvino, donde encontrarás opciones sin gluten y un trato cercano. Aunque no pertenecen a la Asociación de Celíacos de Cantabria, muchos de ellos están familiarizados con la dieta sin gluten y cuidan al detalle la preparación de los platos.
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MAPA DE LAREDO
Y así, queridos Glutendtrotters, ponemos el broche final a esta ruta por Cantabria, una tierra infinita en paisajes, historia y emociones. Desde la elegancia marinera de Santander, pasando por el encanto medieval de Santillana del Mar, hasta las playas doradas y la esencia atlántica de Laredo, este recorrido es la mejor forma de descubrir Cantabria en 3 días.
Cada parada revela un pedacito del alma cántabra: naturaleza salvaje, tradiciones vivas y una gastronomía que conquista a cualquiera. Y lo mejor es que aquí, los viajeros celíacos también tenemos un lugar a la mesa, con propuestas deliciosas y seguras en cada rincón.
No lo pienses más: prepara tus maletas, sigue esta guía y déjate llevar por el ritmo pausado de una región que enamora sin artificios. Cantabria te espera con los brazos abiertos y un sinfín de experiencias por vivir.
Y, por supuesto, cuando regreses, comparte tus vivencias con la comunidad Glutendtrotter. Nos encanta leer vuestras experiencias y descubrir, juntos, nuevos rincones donde el viaje —y la vida sin gluten— se disfrutan aún más.
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Preguntas Frecuentes (FAQs)
En tres días puedes descubrir algunos de los lugares más emblemáticos de Cantabria: Santander con su bahía y el Palacio de la Magdalena, Santillana del Mar con su encanto medieval y la Cueva de Altamira, y Laredo con sus playas infinitas y su ambiente marinero. Es un itinerario perfecto para combinar naturaleza, cultura y gastronomía cántabra.
La mejor época para visitar Cantabria es entre mayo y septiembre, cuando el clima es más cálido y los días son largos. En verano podrás disfrutar de las playas y de eventos como la Batalla de Flores en Laredo, aunque la primavera y el otoño también ofrecen paisajes verdes y menos afluencia turística.
Santander es una base ideal para recorrer Cantabria en 3 días, ya que está bien comunicada y ofrece muchas opciones de alojamiento. También puedes optar por alojarte una noche en el interior, por ejemplo en Santillana del Mar o en algún pueblo de los Valles Pasiegos, para disfrutar del entorno rural.
Entre los platos típicos que no te puedes perder están el cocido montañés, las rabas, la merluza a la cazuela, los quesos pasiegos y los postres tradicionales como los sobaos y las quesadas. En muchos restaurantes encontrarás opciones sin gluten para disfrutar de la gastronomía cántabra con total tranquilidad.
Sí, aunque tener coche facilita mucho los desplazamientos, puedes moverte por Cantabria en transporte público. Hay trenes y autobuses que conectan Santander con localidades como Torrelavega, Santillana del Mar o Laredo, además de excursiones organizadas que te permiten visitar los principales lugares turísticos sin necesidad de conducir.